Energía

Transmisión de energía de Belo Monte retira vegetación nativa en Brasil

Para construir el primer circuito de la línea de transmisión de la represa hidroeléctrica de Belo Monte será necesario suprimir vegetación nativa de una superficie total equivalente a 1700 estadios de fútbol a lo largo del trayecto de casi 2.100 km, el cual atraviesa dos de los cinco biomas brasileños: la Amazonía y el Cerrado. Esta línea, que sale de la ciudad de Anapú, en Pará, y llega hasta Ibiraci en Minas Gerais, atravesará 207 ríos de las principales cuencas hidrográficas del país, incluyendo una travesía de 1.800 metros en el río Araguaia. La información proviene del informe de impacto ambiental del proyecto. El segundo circuito será todavía más extenso, con una longitud de aproximadamente 2.500 km. Saldrá del estado de Pará y llegará hasta Río de Janeiro. También será necesario destruir vegetación selvática y bosques nativos para que sus torres puedan erguirse. Sin embargo, los estudios ambientales difundidos de este tramo no contienen información sobre la cantidad de vegetación que será suprimida y sobre cuántos ríos se encontrarán en el camino del trazado. Ambos proyectos son llevados a cabo por la misma empresa, la china State Grid que desde que llegó al país en 2010 se ha transformado en una gran potencia del sector energético brasileño, obteniendo proyectos que sumados dan más de 10 mil km en líneas de transmisión. Además, recientemente hizo una importante adquisición del 23% de CPFL Energía, una de la empresas más importantes del país, con actuación en los segmentos de generación, distribución y comercialización de energía. En el primer circuito, la multinacional posee el 51% del proyecto y se asoció con las empresas estatales Furnas y Eletronorte. Juntas han establecido una empresa específica para llevar a cabo la obra: Belo Monte Transmisora de Energía (BMTE). En el segundo tramo de la línea, la empresa china es la única dueña del emprendimiento, pero también ha formado una empresa específica para el proyecto, denominada Xingu Rio Transmisora. La línea de Belo Monte es la primera en Brasil que utiliza la tecnología de Ultra Alta Tensión en corriente continua, introducida y popularizada en el mercado mundial por empresas chinas. Si se utiliza una tensión de 800 kilovoltios (kV), la ventaja de utilizar esta tecnología en términos ambientales tiene que ver con que al transportar grandes bloques de energía de una vez se evita construir otros emprendimientos. “También es mayor la distancia entre las torres, lo que aumenta la posibilidad de adaptarse al trayecto para evitar eventuales impactos,” explicó Newton Zerbini, director de medio ambiente de BMTE, en conversación con Diálogo Chino. Zerbini cuenta que en su sector no hay trabajadores chinos y que los brasileños se ocupan del día a día de las cuestiones ambientales del proyecto. Los chinos únicamente se involucran con las cuestiones ambientales en las reuniones del directorio colegiado, que está compuesto por dos chinos y dos brasileños, incluyendo a Zerbini. “Ellos no poseen conocimientos sobre la legislación ambiental brasileña. A menudo es difícil hasta para ellos entender por qué un problema ambiental atrasa la obra. En su país eso es bastante diferente,” explica. Normas brasileñas La legislación ambiental brasileña, que pone el foco en cuestiones sociales y ambientales, es una de las más complejas del mundo, con más de 20 mil normas. Es por eso que las empresas chinas que actúan en Brasil prefieren delegar los temas ambientales en sus colaboradores locales. “Cuando no tienen personal propio que posea todas las competencias, destinan recursos para contratar empresas especializadas en esos temas en Brasil,” dice Ênio Fonseca, presidente del Foro del Medio Ambiente del Sector Eléctrico (FMASE). En Brasil, para los inversores, la licencia ambiental que necesitan los proyectos de generación de energía constituye algo así como “una piedra en el zapato”, dado que su otorgamiento muchas veces llega a demorarse años. Sin embargo, el proceso de obtención de licencias para la súper-línea de Belo Monte en cierto modo ha sido tranquilo y rápido. “Trabajamos con el plazo legal de nueve meses. Ellos obtuvieron la licencia provisoria en seis meses, lo que no es una excepción. Eso depende de quién lleva a cabo la licencia: si nos organizamos con un equipo robusto para el emprendimiento, logramos anticiparla. Algunos proyectos tardan más porque a veces necesitamos, por ejemplo, de estudios complementarios. Lo que no sucedió en este caso, ya que el estudio ambiental fue aprobado de una”, según cuenta Claudia Barros, coordinadora del sector de Energía del directorio de licencias del Instituto Brasileño del Medio Ambiente (IBAMA). Para obtener las licencias del segundo circuito, State Grid contrató a la empresa Concremat Ambiental, que desarrolló los estudios de impacto. El año pasado, ejecutivos de State Grid Brasil, incluyendo al presidente, Cai Honxgian, fueron en forma personal al IBAMA a conversar sobre la licencia, en lo que se considera como un gran riesgo en lo que atañe al atraso de las obras, en el caso de que dicha licencia no se obtenga en el plazo estipulado. “Hemos recibido el estudio de impacto [del segundo circuito] en julio de 2016”. El estudio fue aceptado y State Grid está aguardando por la licencia provisoria del proyecto, para luego solicitar la licencia de instalación. Información ambiental en los BRICS Una investigación realizada por la Universidad Federal de Ceará compara los niveles de difusión de la información ambiental de 90 empresas que pertenecen al sector de la energía eléctrica de los países que forman el BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica). Para realizar el relevamiento de los datos, se utilizaron como parámetro los indicadores de desempeño ambiental proporcionados por la Global Reporting Initiative (GRI), englobando aspectos ambientales tales como el uso del agua, el uso de la energía, el aporte para el calentamiento global, substancias que destruyen la capa de ozono y el descarte de residuos. “Se identificó que aquellas corporaciones que poseen sede en Sudáfrica, Brasil y Rusia fueron las que tuvieron el mayor nivel de ‘disclosure’ [revelación] ambiental, siendo que las empresas indias y chinas presentaron un nivel menor de divulgación de indicadores ambientales los cuales servirían como base para realizar el estudio (GRI)”, afirma la investigación. El estudio afirma que en general, las empresas del sector de energía eléctrica de la muestra estudiada no presentan un alto nivel de divulgación ambiental. Por lo tanto, el nivel de divulgación de información ambiental de las empresas del sector de energía eléctrica de los BRICS debe mejorarse. Problemas sociales Diálogo Chino recorrió algunas ciudades donde se instalará la línea de transmisión de Belo Monte. En el interior del estado de Goiás, localizado en el municipio de Uruaçu, BMTE instaló un cantero de obras a pocos km del centro de la pequeña ciudad de 40 mil habitantes. El emprendimiento benefició a la población local con muchos puestos de trabajo, pero también ha ocasionado algunos problemas sociales. Nuestros reporteros descubrieron tres prostíbulos ubicados a menos de 20 metros de los alojamientos de los empleados. Según Thiago César Meireles, secretario de Medio Ambiente de Uruaçu, eso es normal. “Cuando hay una gran población masculina, se abren comercios de ese tipo. Los operarios viven en casas que hospedan entre 10 y 50 hombres. Cuando cobran el salario, quieren relajarse,” afirma Meireles que también reconoce la supresión vegetal y la influencia de la obra en el movimiento de animales en áreas de corredores ecológicos.   Nuestros reporteros entraron en contacto con State Grid, que prefirió no responder a las preguntas que se enviaron vía correo electrónico. En el sitio de la empresa, la sección que se refiere a los temas ambientales de los emprendimiento se encuentra “en construcción”.