Clima & Energía

China dejará de recibir trato privilegiado de Argentina

De común acuerdo, se realizará una revisión de los protocolos

China dejará de tener un trato privilegiado en su relación con Argentina. Más de 20 acuerdos firmados entra ambos países serán sometidos a una revisión para “corregir los errores”, para que “sean más transparentes” y con el objetivo de que “sea beneficiosos para ambas partes”. Las afirmaciones corresponden al propio presidente de Argentina, Mauricio Macri, que tuvo un encuentro con su par chino Xi Jinping en Washington (US), el viernes (1º de abril), en una reunión paralela del 4 º Cumbre de Seguridad Nuclear. “Su apoyo (de China) es clave para la vuelta de Argentina al mundo. Este apoyo que hemos recibido en infraestructura debe crecer.  Invito a las empresas chinas a que vengan al país. No sólo las energéticas, también para construir puentes, trenes y rutas.  Hay zonas áridas e inundables para aprovechar y transformar en áreas productivas”, afirmó Macri al revelar que China se mostró dispuesta a revisar los acuerdos y a ampliar las relaciones, en lugar de reducirlas. Según el propio Macri,  el objetivo de este primer encuentro fue profundizar la alianza estratégica entre los países para redefinir algunos acuerdos que, hasta el momento, habían sido objetados por el mandatario. El presidente argentino se refería  especialmente a la construcción de usinas nucleares y a los proyectos hidroeléctricos que estaban incurriendo en errores técnicos, irregularidades y de confidencialidad, como era el caso de  las  represas Jorge Cepernic y Néstor Kirchner, en la provincia de Santa Cruz. Dichos acuerdos fueron firmados por su predecesora Cristina Kirchner, y Macri ya había avisado que los revisaría cuando fue electo, en noviembre del año pasado. El cambio de gobierno también generó desconfianza entre los chinos, en relación a los rumbos que tomaría la política exterior argentina, en especial en su relación bilateral con el país asiático. Algo que parece haber sido superado luego de que Xi Jinping afirmara este viernes que “estaba dispuesto y en sintonía” con respecto a la revisión de los acuerdos. “Invitamos a las empresas argentinas a que exploren el mercado chino. Queremos ampliar la cooperación en infraestructura, en el terreno agrícola. Intensificar la cooperación financiera y profundizar el intercambio cultural, ciencia y tecnología y fútbol”, afirmó Xi Jinping luego de la reunión bilateral. Macri confirmó que China seguirá siendo un socio estratégico del país y que los chinos no se mostraron molestos con la propuesta argentina de revisar los acuerdos.  El hecho de que los jefes de Estado se reúnan es una muestra del interés de la diplomacia argentina en “estar abierta a todo el mundo”, afirmó Susana Malcorra, ministra de Relaciones Exteriores de Argentina. Macri y Xi volverán a encontrarse en el mes de septiembre en China, durante la reunión del G-20 en la cual se dan cita las 20 economías más importantes del mundo. Una relación madura “Estamos, en este momento, precisamente mirando todos esos acuerdos y estamos encontrando la forma de asegurarnos que estos acuerdos van a estar en línea con las prioridades del país. Nosotros tenemos como política de Estado relacionarnos con todos los países del mundo y China es un socio estratégico, pero queremos continuar con la relación con China y queremos hacerlo de manera madura. Creo que las relaciones tienen que ser transparentes y públicas.  Tenemos que tener mucho cuidado en el manejo de las clausulas reservadas, tenemos que asegurarnos de que las condiciones se condigan con los tratos del mercado”, afirmó Malcorra, respondiendo a una consulta de Diálogo Chino. Según evalúa Margaret Myers, directora del programa China y América Latina del think tank Inter-American Dialogue,  China tendrá que ser competitiva y dejará de recibir un trato preferencial por parte de Argentina, como ocurría antes, en la era Kirchner. “Esta reunión ha servido para múltiples propósitos, tanto económicos como diplomáticos. Creo que, a partir de ahora, China no recibirá el mismo trato que tenía durante el período Kirchner. A pesar de todo, la relación seguirá siendo fuerte y podrá crecer todavía más con el gobierno Macri”, afirmó Meyers a Diálogo Chino. Los chinos siguen siendo bienvenidos en Argentina, dijo la especialista. Los futuros acuerdos entre ambos países no están en riesgo, pero la reunión de este viernes mostró señales de un cambio en el péndulo, en relación a cómo se darán las relaciones entre los intereses chinos y los de Argentina, que a partir de ahora podría hasta cambiar el parámetro con respecto a cómo los latinoamericanos vislumbrarían las futuras colaboraciones con el gigante asiático. “La relación entre China y Argentina sigue siendo desequilibrada, del mismo modo en que lo es, en última instancia, con la región. Pero el presidente Macri parece querer corregir ese desequilibrio”, destacó Meyers. Esta primera bilateral fue la primera señal de que serán necesarios esfuerzos de ambos países para lograr acuerdos de cooperación que sean “mutuamente beneficiosos”. Meyers opina que existen indicadores claros de que este cambio está en curso, pero que progresará lentamente. “Por lo menos ya existe un conocimiento de que hay mucho por hacer para que la relación se transforme en beneficiosa” para ambos lados. Tal vez sea la primera vez que los chinos tienen la oportunidad de desarrollar con Argentina una relación legítima en la que todos ganan (win-win), acordó  Robert Evan Ellis, profesor e investigador en temas latinoamericanos del Instituto de Estudios Estratégicos de Pensilvania. “Vemos a Macri como un hombre de negocios que reafirma su interés de trabajar con los chinos con reglas diferentes y que se muestra como un aliado confiable que posee instituciones sólidas. Percibo que el presidente argentino está intentando terminar con el aislamiento en que vivía Argentina en la administración anterior”, explicó a Diálogo Chino. Para Evan Ellis, la reacción de Macri de revisar los contratos firmados anteriormente con China es positiva.“Existen muchas razones para que seamos optimistas sobre el futuro de la relación entre los dos países. Los chinos son buenos en el arte de negociar. Sabiendo negociar en forma efectiva, se podrá lograr un acuerdo creíble. Pero si se negocia en forma inocente, eso no se logrará.”. El analista norteamericano considera que los próximos pasos de ambos países deben ser maduros. “Si ambos negocian con cuidado, los beneficios serán mutuos. Esta relación puede ir más allá de lo simbólico y de la ideología, como dos países que pueden respetarse y trabajar juntos. También será positivo para China, porque los empresarios chinos estarán más seguros al relacionarse con un gobierno que se muestre competente no solamente en el momento de firmar los tratados sino también en el de ejecutarlos”.