Clima & Energía

El Papa habla de “crisis ecológica” y reclama a líderes un acuerdo climático en París

Ambientalistas elógian discurso hecho en la ONU

La “crisis ecológica” global y la destrucción masiva de la biodiversidad pueden poner en riesgo la existencia de la humanidad. Éste fue el gran mensaje que el Papa Francisco les envió a los líderes mundiales en su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York, este viernes (25).

“Cualquier daño que se le haga al medio ambiente es, por lo tanto, un daño que se le hace a la humanidad”. La crisis ecológica, junto con la destrucción de gran parte de la biodiversidad, pondrá en peligro la existencia de la especie humana. Los seres humanos forman parte de la naturaleza, vivimos en comunión con ella. Pero el medio ambiente implica límites éticos que deben ser respetados por las acciones humanas”, afirmó.

En la apertura de la Cumbre de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible, el pontífice reclamó la realización de un acuerdo climático efectivo en la conferencia de París, que se realizará en Diciembre, y exhortó a los países a que asuman compromisos “fundamentales y efectivos”.

“La adopción de la Agenda de 2030 para el desarrollo sostenible de esta cumbre mundial que comienza hoy es una importante señal de esperanza. Tengo confianza en que la Conferencia de París sobre el cambio climático se alcancen acuerdos fundamentales y eficaces”, agregó.

Francisco fue el cuarto Papa que discursó en la Asamblea General de las Naciones Unidas. Su antecesor fue Benedicto XVI, en 2008. Juan Pablo II le habló dos veces a los líderes mundiales, en 1979 y 1995. Y el primero fue Paulo VI, en 1965.

Esta vez, el Papa le pidió a los líderes acciones concretas y no sólo declaraciones y anuncios políticos. “Recuerden que estamos tratando con hombres y mujeres reales, que viven, luchan y sufren.

Medio ambiente y desigualdad social

Según Francisco, la explotación y la destrucción del medio ambiente “van acompañados de un proceso de exclusión social”.

El Papa criticó duramente a las sociedades de consumo e incitó al mundo a cambiar sus hábitos. “Un afán egoísta e ilimitado de poder y bienestar material nos lleva a abusar de los recursos materiales disponibles y, de este modo, a excluir a los débiles. La exclusión económico-social es una negación total de la fraternidad humana. Es un gravísimo atentado contra los derechos humanos y el medio ambiente. Los más pobres son los que más sufren, por tres motivos: son descartados por la sociedad, al mismo tiempo obligados a vivir del descarte y sufren las consecuencias de la explotación que se hace del medio ambiente según la tan consolidada cultura del descarte”.

El líder de la Iglesia Católica defendió el “respeto absoluto por la vida, en todas sus etapas”. Si no se reconocen los límites éticos, actuando inmediatamente en relación a los pilares de desarrollo humano integral, el ideal de la promoción del progreso social y los objetivos de desarrollo sostenible no se alcanzarán”, declaró.

En la opinión de Kitty van der Heijden, del World Resources Institute (WRI), el mensaje principal que el Papa le está enviando a la comunidad internacional tiene que ver con la relación íntima y profunda entre los seres humanos y el medio ambiente en que vivimos.

“Lo que me conmovió en el discurso del Papa fue su mensaje de esperanza. Admite que tenemos un terrible desafío por delante, pero afirma que todavía hay esperanza. Podemos cambiar nuestra manera de estructurar la economía, la manera en que gestionamos la generación de residuos y también podemos cambiar la manera en que enfrentamos el cambio climático. Se trata, en el fondo, de una cuestión de elección. Francisco fue muy incisivo cuando habló de moralidad en las elecciones”.

Luego de dar un discurso de casi 50 minutos en español, el Papa argentino fue aplaudido de pié por los jefes de Estado y de gobierno.

Kitty Heijden conversó con el Diálogo Chino apenas terminado el discurso del religioso. “Personalmente creo que el mensaje que el Papa dejó hoy fue estimulante para acciones futuras. Su preocupación por la humanidad, por el medio ambiente en todos los continentes, religiones y diferentes grupos étnicos es una señal para que el mundo se una y empiece a implementar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Si algunos no lo hicieren, dicha acción nos impactará a todos”.

Derecho a la naturaleza

Cuando Francisco destacó el “derecho a la naturaleza y también el desafío de erradicar la pobreza, a Kitty Heijden le pareció que estaba viviendo un momento único. “Fue fantástico que una personalidad como la del Papa, que con su credibilidad y status moral llame la atención hacia el hecho de que no se trata apenas del medio ambiente en sí mismo, sino de la manera en que vivimos hoy en día. Atentó contra la forma en que usamos los recursos naturales, hacia nuestra cultura del desperdicio y del consumismo”, argumentó.

Al mencionar que el daño que se hace al medio ambiente también es un daño hacia la humanidad, para la directora del WRI, estamos hablando de una forma “muy poderosa de enviar un mensaje sobre la esencia de lo que son los nuevos ODS. Ya que no podemos erradicar la pobreza si no sabemos cuidar de nuestros ambientes naturales. Y, a final de cuentas, lo que está en juego es la supervivencia de la humanidad a largo plazo”.

Agenda post 2015

La Cumbre de la ONU sobre Desarrollo Sostenible, que se desarrolla entre el 25 y el 27 de septiembre en Nueva York, lanzará formalmente un paquete de 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) hasta 2030.

A partir de ahora, el gran desafío será implementar la nueva agenda post 2015, admitió Winnie Byanyima, directora ejecutiva de Oxfam internacional. “Todo lo que defendemos como organización fue reforzado por el Papa en su discurso, fue totalmente inspirador y se trató de un momento histórico. Debemos celebrar, pero tenemos cautela en relación a la implementación de las nuevas metas”.

Según destacó a Diálogo Chino, uno de los puntos altos del pronunciamiento de Francisco fue cuando el religiosos relacionó la destrucción ambiental con la exclusión social y económica de las poblaciones del mundo. “El Papa puso los derechos humanos en el centro de la agenda de los ODS. Incitó a dar pasos efectivos y concretos con medidas inmediatas para terminar con la exclusión económica y proteger naturaleza. Ahora debemos trabajar para implementar las metas y seguirlas de cerca.

La protección del medio ambiente y el derecho a una vida digna sin pobreza fue el gran mensaje que el Papa intentó transmitirle al mundo. “Desafió a los líderes a actuar en las causas estructurales, que excluyen a las personas político y socialmente y generan pobreza y destrucción ambiental. Fue un mensaje muy poderoso”, comentó la representante de Oxfam.

En un momento clave del discurso, el Papa desafió a las instituciones financieras internacionales, como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, a sumar esfuerzos para reducir las desigualdades. “Defiende una gobernanza internacional más equilibrada, además de una reforma en el Consejo de Seguridad y de las organizaciones financieras para darle más voz a los países en desarrollo. Y afirmó que está en contra de los mecanismos que sujetan las economías, generando pobreza y haciendo que dichos países queden cada vez más endeudados”, analizó Byanyima.

Para los especialistas, el Papa Francisco ha logrado transmitir un mensaje alentador a los líderes mundiales reclamando “voluntad política” para incluir la justicia social entre las metas de desarrollo para 2030.